En el transitar de la delgada e invisible línea de la fe , cuando las creencias que buscan consuelo se convierte en esperanza del enfermo sin seguridad social, y cuando un paraje como Espinazo en Nuevo León sobrevive de la nada en medio del desierto, es cuando aparece José Fidencio Constantino Sintora, “ El Niño Fidencio”-
El fidencismo se viste de fiesta, y entre olores fétidos del charquito lleno de agua y lodo, las empalagosas colonias baratas y las fritangas, “El niño” se hace sentir en cuerpos prestados, son “las cajitas o materias” que se encargan de sanar los males terrenales y también los espirituales.
Han transcurrido mas de siete décadas y lo cierto es que el “Niño Fidencio” mantiene viva a la comunidad de Espinazo.
Me sorprende que a pesar de que llevan varios días estas fotos en tu Blog Maestro, No tengas comentarios.......Son verdaderamente maravillosas....la Secuencia de la ancianita antes y después del baño en el lodo sagrado...Felicidades
ResponderEliminarUna serie muy buena, profunda, que nos da mucho en qué reflexionar.
ResponderEliminarabrazo. Excelente
Yo quiero ir a esa festividad, se ve que la disfrutaste mucho pues el resultado fue extraordinario, saludos Migue desde la Bella y caótica Xalapa.
ResponderEliminarMike por eso eres nuestro maestro, sorprendentes y muy fregonas las fotos!!!
ResponderEliminaruna festividad que da de si para poder darce fotograficamente, muchas felicidades y pues esperar para octubre para ir!!!!